El representante permanente ruso ante la ONU, Vasili Nebenzia, declaró este miércoles, en una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU sobre la situación en Siria, que Israel está violando la integridad territorial de ese país árabe y las decisiones jurídicas internacionales con sus acciones militares en los Altos del Golán.
"Nos gustaría destacar la amenaza directa que para la integridad territorial de Siria suponen las acciones ilegales de Israel, que está llevando a cabo una política de hechos consumados en los Altos del Golán ocupados y ya se ha apoderado de 500 kilómetros cuadrados de tierra siria", afirmó el diplomático. Nebenzia manifestó que las "acciones ilegales" del país hebreo constituyen "una violación flagrante de las decisiones jurídicas internacionales, incluyendo numerosas resoluciones del Consejo de Seguridad y de la Asamblea General".
Además, aseveró que "los ataques aéreos y los bombardeos israelíes, así como la violencia desenfrenada en muchas zonas, están causando sufrimiento, víctimas civiles y la interrupción de la infraestructura civil", y expresó la preocupación de Rusia por la situación humanitaria en el país. De otra parte, anunció que Moscú seguirá "prestando al pueblo sirio una asistencia polifacética", al entregar ayuda humanitaria, ayudar en la reconstrucción de las infraestructuras sociales destruidas en el conflicto y colaborar en la creación de una base material para el retorno de los refugiados sirios y las personas desplazadas temporalmente.
- Desde la caída del Gobierno del presidente sirio, Bashar al Assad, las Fuerzas de Defensa de Israel han llevado a cabo masivos ataques aéreos contra un significativo número de bases e instalaciones militares. Al mismo tiempo, tomaron el control de la zona de amortiguamiento de los Altos del Golán.
- El Ejército del país hebreo justifica sus acciones como actividades de "defensa" para prevenir cualquier amenaza. En diciembre, el ministro de Defensa israelí, Israel Katz, ordenó la creación de una "zona de seguridad estéril" sin presencia israelí permanente en el sur de Siria, más allá de la zona de amortiguamiento de los ocupados Altos del Golán, una acción que amparó como necesidad de proteger a Israel de "amenazas terroristas".